Omnibus
doble piso aprueban ensayos de vuelco
Asi lo demuestran las pruebas
realizadas por el INTI
Basado en extracto
de Notas publicadas en la revista El Auto Colectivo
- Año 75 Números 561 y 562 / 2009
Las distintas marcas de ómnibus
doble piso que circula en el país aprueban los
ensayos de estabilidad que realiza el Instituto Nacional
de Tecnología Industrial (INTI).
Osvaldo Zannoni -coordinador del departamento
Automotor- expresó "El ensayo permite demostrar
si la posición del centro de gravedad del micro
es suficientemente segura al vuelco".
"Las normas europeas dan por aprobada
la cualidad de seguridad en la medida que supere el
parámetro de 28 grados de inclinación
para ambos laterales, sin volcar o bien sin que llegue
al equilibrio inestable" precisó.
La decisión de someter a ensayos
a prototipos de unidades de doble piso fue una iniciativa
de la Secretaría de Transporte tras los cuestionamientos
acerca de si estos micros tenían la suficiente
estabilidad.
Mediante la Resolución 101/2008,
Transporte modificó el Manual de Especificaciones
Técnicas para Vehículos de Transporte
por Automotor de Pasajeros y designó al INTI
para realizar el ensayo de estabilidad en micros que
superen los 3.80 metros de altura.
A partir de dicha Resolución,
la Comisión Nacional de Regulación del
Transporte (CNRT) no admite la habilitación de
unidades cero kilómetro que no satisfagan estos
ensayos.
"Se trata de un ensayo estático
representativo y es el primero de este tipo que se realiza
en Argentina para evaluar la condición de estabilidad
de estos vehículos" afirmó Zannoni.
El ensayo fue desarrollado por el INTI en conjunto con
el laboratorio IREAYA en una plataforma especialmente
diseñada.
"La muestra de ensayo es representativa
de las distintas configuraciones de la oferta comercial
de cada empresa carrocera y representa el caso más
desfavorable al vuelco, a su vez, la prueba debe hacerse
para cada marca de chasis" detalló Zannoni.
La carga prevista por pasajeros fué
reproducida colocando en cada asiento tanques de agua
de 70 Kg, asegurando de reproducir la posición
de los respectivos centros de gravedad. Asimismo fue
reproducida la carga de diseño de la bodega.
El ingeniero informó que además
están en proceso de implementación diferentes
sistemas de seguridad como el freno ABS -sistema antibloqueo-
que regula automáticamente la presión
de frenaado confiriendole al omnibus mayor estabilidad.
La velocidad indica que estas unidades son seguras entre
90 y 100 Km/h por lo cual es prudente limitar la velocidad
a este parámetro.
Como elemento complementario en cada
prueba y a pedido del fabricante, se puede aumentar
el ángulo hasta la situación de inicio
del vuelco, dato útil para un estudio analítico
si en el futuro se desarrolla un nuevo modelo de carrocería
donde el centro de gravedad adquiera una posición
más crítica.
Es deseable en este contexto que las
rutas de nuesto país, muchas de ellas con marcados
niveles de obsolescencia y elevado riesgo accidentológico
para la dinámica del transporte actual, vayan
adecuándose también a las necesidades
y requerimientos de movilización automotor de
un siglo XXI que exhibe fuertes demandas de actualización
acorde al crecimiento del comercio, el transporte de
personas y la movilidad en general.
Las rutas angostas y de doble sentido
direccional son sinónimo de elevado riesgo accidentológico
y de una alta carga siniestral.
En las angostas rutas aún existentes
en Argentina, diseñadas para vehículos
de 2.40 metros de ancho máximo, hoy circulan
ómnibus y camiones de 2.60 metros y con alturas
de 4.1 metros y automóviles particulares que
desarrollan altas velocidades para las cuales no han
sido preparadas. En este contexto la siniestralidad
vial tiene que ver más con la vía, la
conducción y la falta de conciencia sobre los
riesgos asumidos que con los vehículos.
Celebramos que por fin se haya desmitificado
el tema de que por su altura los ómnibus de doble
piso son peligrosos. Son tan seguros como cualquier
otro vehículo comercial.
Sí nos preocupa a diario observar
cómo por las mismas rutas donde circulan los
referidos vehículos limitados en su velocidad
máxima, lo hagan otros de carga con más
de 30 o 40 toneladas a velocidades que superan los 100
Kmh, sin restricciones de naturaleza alguna. Algo no
cierra y esperamos que se corrija.
Disminuir al máximo la enorme
brecha accidentológica es tarea y obligación
de todos los sectores.
El autotransporte de Larga Distancia
tiene instalados los limitadores de velocidad máxima,
ha demostrado la seguridad y estabilidad de sus unidades
en pruebas de banco y ha incorporado equipos GPS así
como en los nuevos modelos frenos ABS.
Permanentemente la Agencia Nacional de Seguridad Vial
requiere incorporar exclusivamente en este sector que
es el menos accidentológico de los que opoeran
en las rutas del país, sus propios GPS para monitorear
el funcionamiento del modo lo que se le facilita.
Sería muy positivo ver que otros
sectores de vehículos de gran porte con una siniestralidad
mucho más elevada que el autotransporte de pasajeros,
siguieran el mismo rumbo y tuvieran de parte de las
autoridades la misma preocupación que estas exhiben
respecto al transporte público de pasajeros de
larga distancia.
Revista El Auto Colectivo
Publicación de la Camara Empresaria de Autotransporte
de Pasajeros (CEAP)
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